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Las carreras de autos son un deporte muy empoderador que te hace sentir que tienes mucho control. El subidón de adrenalina que obtienes es muy adictivo. Sin embargo, nunca debes olvidar que las carreras son un juego muy peligroso. La velocidad siempre es peligrosa y los accidentes pueden ocurrir en un abrir y cerrar de ojos.


Cualquiera que corra autos como pasatiempo o en competencias conoce los riesgos que implica este deporte. Además de la posibilidad de daños en el propio vehículo, los conductores también podrían sufrir lesiones personales, lo que podría provocar una discapacidad parcial o incluso total. La muerte también es una posibilidad que no puedes ignorar. Sin embargo, si está dispuesto a invertir su tiempo, esfuerzo y dinero para configurar un automóvil cargado de energía con el que pueda correr, entonces seguramente no estaría de más gastar en engranajes que salvan vidas para garantizar su seguridad mientras corre.


Nunca olvide usar siempre ropa protectora y casco. Las carreras de alta velocidad siempre están llenas de presión. No solo estamos hablando de la presión sobre el conductor para que sea el primero, también estamos considerando la presión que se acumula dentro del motor y otras partes mecánicas o eléctricas debido a la velocidad. También hay que considerar la naturaleza explosiva de NOS, ya que las explosiones son inevitables. De hecho, las explosiones son uno de los principales accidentes que ocurren durante las carreras de autos. Asegúrese de revisar su traje contra incendios no solo en busca de rasgaduras, sino también de cualquier sustancia que pueda anular la capacidad resistente a las llamas de la tela.


Aparte de su traje contra incendios, siempre use guantes y zapatos que sean ignífugos para mayor protección. Use solo cascos que tengan calificaciones de Snell, lo que significa que han pasado previamente múltiples pruebas de impacto. Estos están hechos con material más grueso y son más confiables durante los accidentes. La tela y las pinturas utilizadas en estos cascos también deben ser ignífugas.


Verifique que el motor del automóvil, incluidos, entre otros, las líneas de combustible, los cables eléctricos y el tanque de desbordamiento de refrigerante, asegúrese de que estén bien asegurados y funcionen correctamente. Inspeccione de cerca su cinturón de seguridad para detectar desgaste o cualquier otro defecto. Asegúrese de que los arneses funcionen y que los asientos estén bien atornillados.


Investigue bajo el capó de su coche. Reemplace las mangueras débiles, busque grietas y repárelas. Verifique también el chasis y busque desgaste visible en cualquier componente de escape y suspensión.


Recuerde montar correctamente la batería del automóvil con todas las terminales conectadas firmemente. Sus neumáticos deben tener una profundidad de dibujo de al menos 3/32. Asegúrese de que los pernos de las ruedas estén bien apretados. Si tiene un sistema de óxido nitroso (NOS), asegúrese de que la ventilación de la botella esté hacia el exterior del automóvil.


Nunca conduzcas un auto para competir si no has practicado en él. Dedique tiempo a conocer el funcionamiento interno y externo de cualquier automóvil nuevo antes de la carrera real, incluso si es un conductor experto. Esto se debe al hecho de que cada automóvil puede comportarse de manera diferente a los demás, esto es especialmente cierto para diferentes marcas de automóviles, pero también puede ser cierto para los mismos modelos de automóviles.


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